Tecnología de Recompensas
Cuando tu cliente haya realizado alguna acción, habrá que tomar la decisión de si se debe pagar una recompensa o no. Ahí es donde entra en acción la Tecnología de Recompensas. Piensa que es como un juez que establece las normas y verifica las condiciones para después dar un veredicto final. Tú decides las normas. Por ejemplo, «si un usuario se registra, gana 5€ de cashback». Las normas pueden ser así de sencillas o más elaboradas, en función de tu criterio.
Recompensas a nivel de producto y de cliente:
Maximizamos la funcionalidad y el alcance de tus programas uniendo incentivos a productos o cantidades concretas, lo que anima a los clientes a aumentar las compras. Además de esto, puedes predeterminar funciones específicas. Por ejemplo, podrías recompensar solo a los clientes de ciertas regiones geográficas, a los clientes que gastaron una cierta cantidad de dinero con tu marca, a los clientes nuevos o a los que ya son fieles. ¡Tú decides!
Gestión de las recompensas por niveles:
Con las recompensas por niveles, tienes la libertad de incrementar las recompensas para los clientes que son muy activos o con los que has trabajado mucho. Por ejemplo, puedes ofrecer un mayor pago de incentivos por una recomendación si el cliente cumple unos elevados requisitos de fidelidad.